PorPedro Julio Jiménez Villaseñor
Por muchos es sabido que esta segunda novillada de la temporada, previa a la feria de San Marcos, fue rindiendo un reconocimiento al sacerdote Artemio Ortiz Romo, capellán de los cosos locales, por cumplir 25 años de sacerdote. Don Artemio ofició una misa en el centro del centenario ruedo a la hora del sorteo y antes de terminar oró por los actuantes de este día. Plegarias que fueron escuchadas al mil por uno.
Se lidio un muy bien presentado encierro propiedad de Rodolfo Vázquez, “El Chacho”, que tuvo movilidad aun fueran desiguales en el juego dado, muy bueno el segundo y malo el sexto, del resto podemos decir que permitieron ciertos momentos para que viéramos actitudes, aptitudes y errores de la tercia, en lo general me gusto el encierro. La entrada fue de casi tres cuartos del aforo, un poco más que la registrada hace ocho días, el ambiente se va calentando de maneras y formas muy positivas. Vamos a un corto resumen general.
El primer espada, el potosino Fernando Labastida, verde oliva y oro con remates en negro, recibió a “Alburero”, numero 40, de 391 kilogramos, con excelentes lances a la verónica, quita Didier en su oportunidad y las encomiendas del padre Artemio muestran que fueron escuchadas ya que se da la primera voltereta de quien intervenía. Con la muleta Fernando nos deja ver el sitio que ha adquirido al paso de los meses y que puede hacerse matador de toros si
es que trasmitiera un poco más, que se gustara y contagiara a los tendidos su quehacer. Con la espada se perdió y escuchó un aviso desde el palco de la H. Autoridad. Con “Alabardado”, su segundo y cuarto de la tarde, marcado con el 51 y de 350 kilos, inicia con verónicas intercalando chicuelinas, en la segunda queda atravesado y vuelven a surtir efectos los ruegos del padre Artemio, el pitón le apunto escalofriantemente al bajo vientre sin mayores consecuencias que el susto, comienza su faena instrumentando tres cambiados por la espalda en los medios, derechazos bien estructurados pero que no calan en el animo de los tendido, con la espada vuelve a fallar y de nueva cuenta suena la trompeta que acompaña a las autoridades, se retira en silencio.
Jorge Didier, Jorge es un joven todo valor, todo afición, derrocha cierta alegría en las cosas que hace pero desgraciadamente esta a merced de sus enemigos, inclusive hasta parece equivocarse por momentos y logra pegar largos muletazos, tiene un aguante a toda prueba pero siento no estructura sus faenas. Hoy se ha llevado dos maromas como para quitarle lo valiente al más pintado y sin embargo nunca mostró rajarse, valiente a carta cabal, ya lo decía, valiente entre los valientes pero urge conecte corazón y cabeza, le esperan muchas horas de entrenamiento si no desea lo lastime de verdad un novillo. Mucho le debe Jorge a las oraciones del homenajeado.
Del francés Thomas Dufau. La semana pasado nos dejo ver este alumno del matador Richard Milían que posee el privilegio del temple y que no esta escaso de arte, de clase, hoy así lo constatamos. Si la tarde de su debut no obtuvo trofeos fue por el mal manejo de la espada, ahora el panorama cambio un poco y posterior a largas tandas de derechazos y naturales, entreverando sabrosos adornos, le ha cortado una oreja a “Aragonés”, numero 37, que detuvo la bascula en 384 kilos y esto se da después de un pinchazo. ¿Y a quien creen que se lo brindó?. Acertaron, al padre Artemio.
En el ultimo de la ya tarde-noche, “Alabador” con 403 kilogramos de peso y numero 48, el malo de los pupilos de “El Chacho”, que se volvía en sus manos, el galo supo evitar un desaguisado dando la distancia exacta para reponerse muy correctamente, con recursos se le vio y abandono el coso de prisa ya que hoy lunes aborda la aeronave que le llevará hasta España para hacer una campaña que comienza el domingo entrante
Lo dicho, gracias padre Artemio, sus ruegos salvaron de serios percances a Labastida y a Didier, además afilaron la espada del extranjero y encaminaron a bastantes aficionados a taquillas y tendido, muchas caras de conocidos taurinos de otros estados, principalmente de Zacatecas y San Luís Potosí... ¡Gracias padre Artemio, muchas gracias!.
Se lidio un muy bien presentado encierro propiedad de Rodolfo Vázquez, “El Chacho”, que tuvo movilidad aun fueran desiguales en el juego dado, muy bueno el segundo y malo el sexto, del resto podemos decir que permitieron ciertos momentos para que viéramos actitudes, aptitudes y errores de la tercia, en lo general me gusto el encierro. La entrada fue de casi tres cuartos del aforo, un poco más que la registrada hace ocho días, el ambiente se va calentando de maneras y formas muy positivas. Vamos a un corto resumen general.
El primer espada, el potosino Fernando Labastida, verde oliva y oro con remates en negro, recibió a “Alburero”, numero 40, de 391 kilogramos, con excelentes lances a la verónica, quita Didier en su oportunidad y las encomiendas del padre Artemio muestran que fueron escuchadas ya que se da la primera voltereta de quien intervenía. Con la muleta Fernando nos deja ver el sitio que ha adquirido al paso de los meses y que puede hacerse matador de toros si
es que trasmitiera un poco más, que se gustara y contagiara a los tendidos su quehacer. Con la espada se perdió y escuchó un aviso desde el palco de la H. Autoridad. Con “Alabardado”, su segundo y cuarto de la tarde, marcado con el 51 y de 350 kilos, inicia con verónicas intercalando chicuelinas, en la segunda queda atravesado y vuelven a surtir efectos los ruegos del padre Artemio, el pitón le apunto escalofriantemente al bajo vientre sin mayores consecuencias que el susto, comienza su faena instrumentando tres cambiados por la espalda en los medios, derechazos bien estructurados pero que no calan en el animo de los tendido, con la espada vuelve a fallar y de nueva cuenta suena la trompeta que acompaña a las autoridades, se retira en silencio.
Jorge Didier, Jorge es un joven todo valor, todo afición, derrocha cierta alegría en las cosas que hace pero desgraciadamente esta a merced de sus enemigos, inclusive hasta parece equivocarse por momentos y logra pegar largos muletazos, tiene un aguante a toda prueba pero siento no estructura sus faenas. Hoy se ha llevado dos maromas como para quitarle lo valiente al más pintado y sin embargo nunca mostró rajarse, valiente a carta cabal, ya lo decía, valiente entre los valientes pero urge conecte corazón y cabeza, le esperan muchas horas de entrenamiento si no desea lo lastime de verdad un novillo. Mucho le debe Jorge a las oraciones del homenajeado.
Del francés Thomas Dufau. La semana pasado nos dejo ver este alumno del matador Richard Milían que posee el privilegio del temple y que no esta escaso de arte, de clase, hoy así lo constatamos. Si la tarde de su debut no obtuvo trofeos fue por el mal manejo de la espada, ahora el panorama cambio un poco y posterior a largas tandas de derechazos y naturales, entreverando sabrosos adornos, le ha cortado una oreja a “Aragonés”, numero 37, que detuvo la bascula en 384 kilos y esto se da después de un pinchazo. ¿Y a quien creen que se lo brindó?. Acertaron, al padre Artemio.
En el ultimo de la ya tarde-noche, “Alabador” con 403 kilogramos de peso y numero 48, el malo de los pupilos de “El Chacho”, que se volvía en sus manos, el galo supo evitar un desaguisado dando la distancia exacta para reponerse muy correctamente, con recursos se le vio y abandono el coso de prisa ya que hoy lunes aborda la aeronave que le llevará hasta España para hacer una campaña que comienza el domingo entrante
Lo dicho, gracias padre Artemio, sus ruegos salvaron de serios percances a Labastida y a Didier, además afilaron la espada del extranjero y encaminaron a bastantes aficionados a taquillas y tendido, muchas caras de conocidos taurinos de otros estados, principalmente de Zacatecas y San Luís Potosí... ¡Gracias padre Artemio, muchas gracias!.
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