Por El Zubi
Ricardo Torres “Bombita”, triunfador indiscutible en las plazas de toros y una de las grandes figuras del toreo de su época, fracasó en el amor. Un hombre que fue adorado por multitud de mujeres, acabó solo y dedicando toda su atención a su madre y a sus hermanas. Es verdad que las relaciones entre toreros y cupletistas nunca han sido fáciles, pues el machismo imperante en aquellos años, obligaba a las mujeres artistas a la retirada definitiva de los escenarios, y si ella se resistía pues los planes de boda se frustraban, y esta es precisamente la historia que hoy les quiero contar, la frustrada historia de amor entre el torero sevillano Ricardo Torres “Bombita” y la cupletista Aurora Mañanos Jauffret “La Goya” , que en su día fue la pareja de moda en la incipiente prensa del corazón del primer cuarto del siglo XX y que no llegó a cuajar por los recelos del torero a atarse a una mujer y también por la diferencia cultural entre La Goya y él.
“Bombita” y “La Goya” formaron una pareja admirada en todos los círculos de la moda en aquel Madrid de los años veinte. Daban la impresión de un enamoramiento a toda prueba y, sin embargo no llegaron al matrimonio. Ninguno de ellos acepto la retirada, ni él de los ruedos ni ella de los escenarios. Ella es verdad que dejó los escenarios años más tarde pero más bien obligada por un cambio en la moda de los espectáculos. El cuplé comenzó a dar paso a las vedettes, a las mujeres de cuerpo diferente y a los espectáculos con mujeres ligeras de ropa.
Ricardo Torres “Bombita” torero de la dinastía de “los Bombas”, hermano de Emilio y Manuel, nació el 20 de febrero de 1879 en Tomares (Sevilla). Fue como sabemos, una de las grandes figuras del toreo de la época. Un torero dominador y valiente hasta el máximo límite. Muy castigado por los toros, pasó a la historia, además de por ser un gran torero, por ser el creador e impulsor del Montepío de Toreros. Mantuvo cierta rivalidad en los ruedos con el cordobés Machaquito, aunque nunca pudo con él. Si fueron sus grandes rivales los hermanos Gallo, Rafael y José, que irrumpieron de una manera extraordinaria en la Fiesta, el uno por sus genialidades y el otro por su regularidad en las plazas.
Coetánea de Raquel Meller fue La Goya, cuyo verdadero nombre fue Aurora Mañanos Jauffret, nacida en Bilbao en 1891, tuvo una esmerada educación que la diferenciaba del resto de cupletistas, la mayor parte de ellas casi analfabetas, condición que sin duda le llevó a adoptar en el escenario actitudes mas recatadas. Vestía hasta los pies y únicamente se le veían desnudos los brazos. Para cada copla que interpretaba se cambiaba de traje, lo que hizo que sus actuaciones fueran siempre muy lucidas y espectaculares. El seudónimo le vino regalado por el mejor de los historiadores de la época del cuplé, Alvaro Retana, novelista erótico y letrista tanto de picarescas como de románticas letras. En un principio le sugirió que se anunciara como La Tirana, pero claro ya había existido otra cupletista de este nombre hacía más de un siglo. Al parecer el pintor Francisco Goya y Cifuentes pintó a La Tirana, y ambos creyeron que el apellido del pintor de Fuendetodos podía ser un buen reclamo para su carrera artística. No fue por tanto una estrella de la picardía sensual que era lo que entonces mas se llevaba. Este recato de La Goya en los escenarios fue sin duda la circunstancia que contribuyó al enamoramiento del torero por ella. Como artista tuvo la singularidad de dramatizar magníficamente las canciones que cantaba, de añadir al texto la interpretación teatral, por eso la llamaban en su época la “actriz del cuplé”. Su esmerada educación le llevó a hablar perfectamente el inglés, francés e italiano, y además pintaba y tocaba el piano estupendamente, circunstancia que hicieron que la crítica la bautizaran como la “tonadillera intelectual”. El autor teatral Joaquín Dicenta escribió de forma expresa para ella su obra Juan José, una de las obras de mayor éxito en el teatro español. El propio Dicenta, después de la representación de La Goya, comentó casi lamentándolo que era casi imposible rescatar para la comedia a una mujer como ella, porque en la tonadilla y los cuplés ganaba ella mucho más. La Goya además fue una mujer tan apreciada por los intelectuales que para ella escribieron además de Dicenta, Ricardo Baroja, los Álvarez Quintero, Benavente, Martínez Sierra, Linares Rivas y Valle-Inclán. Cobraba por actuación cien pesetas por día, en tiempos en que la mayoría de sus colegas sólo se llevaban dos duros del empresario de turno. Sus canciones mas famosas fueron La tirana de Tripili, música de Ruperto Chapí y letra de Retana; la habanera Ven y ven, música de Rafael Gómez y letra de Retana; El balancé, al que puso letra Ernesto Teglen y música Ricardo Yust, y el famosísimo Tápame, tápame, de Ricardo y Francisco Yust.
Ricardo Torres y Aurora Mañanos “La Goya” vivieron un noviazgo muy de sus tiempos. Con mucho recato, con carabinas en muchos casos, como la madre de la cantante, que solía acompañarlos en las salidas nocturnas. No se sabe si el interés de Bombita por la artista fue todo lo intenso que debiera ser, lo cierto es que tras una larga relación sentimental el noviazgo llegó a romperse. Está claro que la vida de un torero está llena de precauciones y de una dedicación por entero a la profesión en la que esta permanentemente en riesgo la vida, y esta atención constante a su oficio para no distraerse en ninguna aventura amorosa fue la que precipitó que Ricardo y Aurora no acabaran de entenderse. Ricardo Torres “Bombita” no supo digerir bien la ruptura del noviazgo con La Goya y junto al desengaño y a la pelea a la que le estaban sometiendo los hermanos Rafael y José Gallo decidió retirarse de los ruedos. Esto ocurrió en Madrid el 19 de octubre de 1913. Alternaron con él ese día Rafael y José “Gallo”, y Regaterín, que sustituía a Juan Belmonte que estaba herido.
La Goya organizaba e su casa tertulias literarias y en esas reuniones conoció al escritor Tomás Borrás, cronista oficial de la Villa de Madrid, con el que finalmente se casó. La educación de ambos era más parecida, ya que con Bombita existieron demasiados celos profesionales y evidentes desniveles culturales. Ricardo Torres “Bombita” ganó en su época cuatro millones de pesetas y fue un hombre poco dado a fiestas y saraos. Le gustaba vivir en Madrid para ir al teatro, mientras que en Sevilla el ambiente que había era de copeo en las tabernas, cosa que él aborrecía ya que no le gustaba el alcohol. Tras su ruptura con La Goya hizo unas manifestaciones en la revista La Unión Ilustrada, que se editaba en Málaga, en la que manifestaba que tenía “carácter de casado. Siempre he hecho una vida ordenada. Jamás he pasado una noche fuera de casa. Ahora bien, yo creía que mientras tuviera que andar con los toros estaba obligado a no crear una familia. Tenía el ejemplo de que el casamiento había acabado con muchos toreros. Además…el público quiere al artista soltero”.
En realidad Bombita tenía vocación de solterón pegado a las faldas de su madre. La Feria de Abril por ejemplo, no podía pasarla si no era junto a su madre. Tan preocupado estaba por su madre que se retiró de los ruedos también por darle gusto a ella. Era, a la postre, un hombre adorado por las mujeres de su familia, de las que se dijo en su día que juntas, habían batido todos los record de rezos. Ya retirado y durante una determinada época Ricardo Torres se dedicó a negocios de exportación con una empresa barcelonesa, y tenía mucho cuidado con las inversiones que hacía pues siempre buscaba lo seguro. Años mas tarde visitó de nuevo Madrid, pero no para saludar a su antigua novia, sino a comprar bonos del Tesoro.
De esta frustrada historia de amor cabe concluir que Aurora Mañanos “La Goya” fue una mujer de personalidad mas fuerte y de un nivel cultural mas elevado que el del torero, un hombre que nunca acabó de salir de las faldas de su madre. Mucho barco para tan poco marinero, que dice el refrán… para que nos entendamos.
“Bombita” y “La Goya” formaron una pareja admirada en todos los círculos de la moda en aquel Madrid de los años veinte. Daban la impresión de un enamoramiento a toda prueba y, sin embargo no llegaron al matrimonio. Ninguno de ellos acepto la retirada, ni él de los ruedos ni ella de los escenarios. Ella es verdad que dejó los escenarios años más tarde pero más bien obligada por un cambio en la moda de los espectáculos. El cuplé comenzó a dar paso a las vedettes, a las mujeres de cuerpo diferente y a los espectáculos con mujeres ligeras de ropa.
Ricardo Torres “Bombita” torero de la dinastía de “los Bombas”, hermano de Emilio y Manuel, nació el 20 de febrero de 1879 en Tomares (Sevilla). Fue como sabemos, una de las grandes figuras del toreo de la época. Un torero dominador y valiente hasta el máximo límite. Muy castigado por los toros, pasó a la historia, además de por ser un gran torero, por ser el creador e impulsor del Montepío de Toreros. Mantuvo cierta rivalidad en los ruedos con el cordobés Machaquito, aunque nunca pudo con él. Si fueron sus grandes rivales los hermanos Gallo, Rafael y José, que irrumpieron de una manera extraordinaria en la Fiesta, el uno por sus genialidades y el otro por su regularidad en las plazas.
Coetánea de Raquel Meller fue La Goya, cuyo verdadero nombre fue Aurora Mañanos Jauffret, nacida en Bilbao en 1891, tuvo una esmerada educación que la diferenciaba del resto de cupletistas, la mayor parte de ellas casi analfabetas, condición que sin duda le llevó a adoptar en el escenario actitudes mas recatadas. Vestía hasta los pies y únicamente se le veían desnudos los brazos. Para cada copla que interpretaba se cambiaba de traje, lo que hizo que sus actuaciones fueran siempre muy lucidas y espectaculares. El seudónimo le vino regalado por el mejor de los historiadores de la época del cuplé, Alvaro Retana, novelista erótico y letrista tanto de picarescas como de románticas letras. En un principio le sugirió que se anunciara como La Tirana, pero claro ya había existido otra cupletista de este nombre hacía más de un siglo. Al parecer el pintor Francisco Goya y Cifuentes pintó a La Tirana, y ambos creyeron que el apellido del pintor de Fuendetodos podía ser un buen reclamo para su carrera artística. No fue por tanto una estrella de la picardía sensual que era lo que entonces mas se llevaba. Este recato de La Goya en los escenarios fue sin duda la circunstancia que contribuyó al enamoramiento del torero por ella. Como artista tuvo la singularidad de dramatizar magníficamente las canciones que cantaba, de añadir al texto la interpretación teatral, por eso la llamaban en su época la “actriz del cuplé”. Su esmerada educación le llevó a hablar perfectamente el inglés, francés e italiano, y además pintaba y tocaba el piano estupendamente, circunstancia que hicieron que la crítica la bautizaran como la “tonadillera intelectual”. El autor teatral Joaquín Dicenta escribió de forma expresa para ella su obra Juan José, una de las obras de mayor éxito en el teatro español. El propio Dicenta, después de la representación de La Goya, comentó casi lamentándolo que era casi imposible rescatar para la comedia a una mujer como ella, porque en la tonadilla y los cuplés ganaba ella mucho más. La Goya además fue una mujer tan apreciada por los intelectuales que para ella escribieron además de Dicenta, Ricardo Baroja, los Álvarez Quintero, Benavente, Martínez Sierra, Linares Rivas y Valle-Inclán. Cobraba por actuación cien pesetas por día, en tiempos en que la mayoría de sus colegas sólo se llevaban dos duros del empresario de turno. Sus canciones mas famosas fueron La tirana de Tripili, música de Ruperto Chapí y letra de Retana; la habanera Ven y ven, música de Rafael Gómez y letra de Retana; El balancé, al que puso letra Ernesto Teglen y música Ricardo Yust, y el famosísimo Tápame, tápame, de Ricardo y Francisco Yust.
Ricardo Torres y Aurora Mañanos “La Goya” vivieron un noviazgo muy de sus tiempos. Con mucho recato, con carabinas en muchos casos, como la madre de la cantante, que solía acompañarlos en las salidas nocturnas. No se sabe si el interés de Bombita por la artista fue todo lo intenso que debiera ser, lo cierto es que tras una larga relación sentimental el noviazgo llegó a romperse. Está claro que la vida de un torero está llena de precauciones y de una dedicación por entero a la profesión en la que esta permanentemente en riesgo la vida, y esta atención constante a su oficio para no distraerse en ninguna aventura amorosa fue la que precipitó que Ricardo y Aurora no acabaran de entenderse. Ricardo Torres “Bombita” no supo digerir bien la ruptura del noviazgo con La Goya y junto al desengaño y a la pelea a la que le estaban sometiendo los hermanos Rafael y José Gallo decidió retirarse de los ruedos. Esto ocurrió en Madrid el 19 de octubre de 1913. Alternaron con él ese día Rafael y José “Gallo”, y Regaterín, que sustituía a Juan Belmonte que estaba herido.
La Goya organizaba e su casa tertulias literarias y en esas reuniones conoció al escritor Tomás Borrás, cronista oficial de la Villa de Madrid, con el que finalmente se casó. La educación de ambos era más parecida, ya que con Bombita existieron demasiados celos profesionales y evidentes desniveles culturales. Ricardo Torres “Bombita” ganó en su época cuatro millones de pesetas y fue un hombre poco dado a fiestas y saraos. Le gustaba vivir en Madrid para ir al teatro, mientras que en Sevilla el ambiente que había era de copeo en las tabernas, cosa que él aborrecía ya que no le gustaba el alcohol. Tras su ruptura con La Goya hizo unas manifestaciones en la revista La Unión Ilustrada, que se editaba en Málaga, en la que manifestaba que tenía “carácter de casado. Siempre he hecho una vida ordenada. Jamás he pasado una noche fuera de casa. Ahora bien, yo creía que mientras tuviera que andar con los toros estaba obligado a no crear una familia. Tenía el ejemplo de que el casamiento había acabado con muchos toreros. Además…el público quiere al artista soltero”.
En realidad Bombita tenía vocación de solterón pegado a las faldas de su madre. La Feria de Abril por ejemplo, no podía pasarla si no era junto a su madre. Tan preocupado estaba por su madre que se retiró de los ruedos también por darle gusto a ella. Era, a la postre, un hombre adorado por las mujeres de su familia, de las que se dijo en su día que juntas, habían batido todos los record de rezos. Ya retirado y durante una determinada época Ricardo Torres se dedicó a negocios de exportación con una empresa barcelonesa, y tenía mucho cuidado con las inversiones que hacía pues siempre buscaba lo seguro. Años mas tarde visitó de nuevo Madrid, pero no para saludar a su antigua novia, sino a comprar bonos del Tesoro.
De esta frustrada historia de amor cabe concluir que Aurora Mañanos “La Goya” fue una mujer de personalidad mas fuerte y de un nivel cultural mas elevado que el del torero, un hombre que nunca acabó de salir de las faldas de su madre. Mucho barco para tan poco marinero, que dice el refrán… para que nos entendamos.
¿Esta Goya es la que da nombre a la famosa manzanilla de Sanlúcar y que dicen fue amante del dueño de la bodega?
ResponderEliminarHola : Interesante escrito. Si es posible, me gustaria saber más detalles sobre su referencia escrita :"se dedicó a negocios de exportación" , ¿ que empresa era , como se llamaba la razon comercial y tipo de productos o mercancias? . Sabemos que la familia de su mujer era muy rica ( importantes industrias textiles) y se dedicaban a la industria textil.
ResponderEliminarMi nombre és Jose Bacardit Sanllehi , resido en Montcada y Reixac(Barcelona) , lugar donde se casó Bombita con Concepcion Regordosa Jover . Pertenezco a una Fundacion Cultural que recupera pedazos de la historia olvidada de mi pueblo asi como personajes famosos que residieron en el mismo , como es el caso de Bombita , existe sobre él interes en saber más de este torero que segun dicen los mas viejos del lugar , oyeron maravillas de el contadas por sus antepasados ( sobre todo por el tema de una boda torero-rica heredera y la desgracia que le persiguió al morir su esposa joven en el momento de dar a luz a su unico hijo de nombre Roman Torres Regordosa, en memoria de ella construyó una capilla "Jesus del Gran Poder" en la finca donde se casaron ( Torre Joana de Montcada)se dedicó a ser mecenas cultural).
Les agradeceria profundamente si me pudise dar más información o alguna pista donde pudiese investigar .
Grácias por anticipado
Mi correo es : jbsanllehi@gmail.com
Tengo que aclarar que Bombita mi tio abuelo aparte de torero majestuoso estudió la carrera de derecho
ResponderEliminar